Georg Steinhauser, de 22 años, es un nombre que todos los aficionados tendrán en cuenta a partir de ahora. Con un físico de 1,89 m de altura, similar al de su tío Jan Ullrich, Steinhauser, hijo de Tobias Steinhauser, ex compañero de equipo de Ullrich en el Telekom, se ha hecho un nombre propio.

Entre los favoritos, Tadej Pogacar quedó segundo, casi sin esfuerzo, ganando tiempo sobre los favoritos que llegaron juntos, excepto Ben O’Connor, quien prácticamente queda fuera de la pelea por el podio.

Un día después de la polémica tempestad, el cielo de los Dolomitas se despejó a primera hora de la mañana. "Esperamos que pueda llegar la fuga. Las sensaciones son buenas, tengo que entrar con otro compañero del equipo y entre los dos buscar la victoria, ya sea con él o conmigo. Puede ser una buena oportunidad", aseguraba Nairo Quintana antes de la salida. Tras quedarse a las puertas del triunfo en la etapa reina, había confianza y fuerza en las piernas. Quintana lideró una fuga de alto nivel, acompañado por Julian Alaphilippe, Amanuel Ghebreigzabhier, Giulio Pellizzari, Georg Steinhauser, Marco Frigo, Damiano Caruso y Davide Ballerini.

En el Passo Sella, convertido en la 'cima Coppi' de este Giro tras las cancelaciones del Stelvio y el Gogio de Santa Maria, se vivió un precioso duelo generacional. Pellizzari, el corredor más joven del Giro con 20 años, tomó ventaja, pero Nairo Quintana apareció en el último instante para disputarle los 40 puntos, el mayor premio de montaña posible.

Por centímetros, la gloria fue para Pellizzari, quien dejó su sello de calidad.

El grupo de favoritos se redujo a la mínima expresión, superando el Passo Rolle con la fuga manteniendo apenas 1 minuto de ventaja. El equipo DSM, apostando en grande por su líder Bardet, controló la carrera, mientras el UAE se mantuvo al margen y Pogacar se frotaba las manos. A 62 km de meta, la fuga fue neutralizada, y el intento de Bardet en el Passo Gobbera quedó en nada.

La doble ascensión al Passo Brocon definió el desenlace. Ghebreigzabhier y Steinhauser lideraron la subida con 40 segundos de ventaja. En la parte final, Steinhauser cambió el ritmo, dejando atrás al eritreo. El alemán, a pesar de la lluvia, mantuvo el control y logró un ritmo inalcanzable para sus perseguidores, estrenando su palmarés a lo grande.

La batalla entre los hombres de la general fue mínima. El Ineos, sacrificando a Arensman por Thomas, no logró el ataque esperado del galés. Dani Martínez y Einer Rubio aceleraron sin mucha convicción, dejando a Pogacar al frente del grupo. El esloveno, ante la duda, arrancó con cautela, consiguiendo la bonificación del segundo puesto y unos segundos más sobre sus rivales. A 18 segundos de Pogacar llegaron los favoritos, encabezados por Tiberi, excepto O’Connor, que se descolgó minutos antes. Más ruido que nueces.