Ante la mencionada situación, adicionada con el nerviosismo evidente del conductor y el acompañante, ambos fueron detenidos.
Enterada la Fiscalía de turno, se dispuso el traslado del vehículo con los ocupantes hacia la comisaría a fin de realizar una inspección minuciosa.
Al efectuarse el registro en las puertas traseras del automóvil, se lograron incautar, desde el interior de las mismas, nueve ladrillos de cocaína con un peso total de 9,393 kilogramos.
Los involucrados, dos hombres de 36 y 29 años de edad, fueron puestos a disposición de la justicia, la cual dispuso la condena de ambos por un delito de transporte de sustancias estupefacientes en concurso formal con un delito de importación de sustancias estupefacientes en grado de tentativa en calidad de autores, a una pena de dos años y diez meses de penitenciaría.
De esta forma, mediante la realización de controles de rutina frecuentes, se refuerza el compromiso del Ministerio del Interior en su constante lucha contra el narcotráfico.