El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Fernando Mattos, ha reconocido la importancia de prepararse para un posible impacto de sequía en el próximo fenómeno de La Niña.

Mattos mencionó que el ritmo de crecimiento de los sistemas de riego a nivel territorial es más lento de lo que se esperaba, a pesar de los avances logrados en el período de gobierno actual.

Durante una entrevista en radio Sarandí, el ministro expresó su preocupación por la necesidad de acelerar el crecimiento de los sistemas de riego incorporados a la producción, especialmente en un contexto donde eventos climáticos como La Niña pueden tener consecuencias económicas significativas. La sequía histórica vivida en Uruguay entre 2022 y 2023 a causa del fenómeno de La Niña anterior dejó pérdidas importantes para el país, resaltando la importancia de estar preparados para enfrentar situaciones similares.

Además, los expertos señalan que el paso del fenómeno de El Niño a La Niña será abrupto, lo que podría traer consigo oscilaciones en los patrones de lluvias y sequías, así como una temporada intensa de huracanes en otras partes del mundo. Este cambio repentino entre los dos fenómenos ha acortado los tiempos para que las comunidades afectadas por El Niño puedan recuperarse rápidamente, lo que resalta la urgencia de adoptar medidas preventivas y de adaptación frente a los eventos climáticos extremos.

El MGAP y las autoridades pertinentes deben estar alerta y tomar medidas proactivas para mitigar los posibles impactos negativos que la llegada de La Niña pueda traer consigo, especialmente en el sector agrícola y ganadero. La planificación y la inversión en infraestructuras de riego son clave para fortalecer la resiliencia del país frente a eventos climáticos adversos.